Diego Alonso, el hijo de la comandante de la Policía Ministerial, Margarita Alonso Huerta, se encuentra en calidad de presentado ante el agente del Ministerio Público como presunto responsable del homicidio de Thalía Martínez Ramírez, la estudiante de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la BUAP, la cual que desapareció el 14 de julio y fue encontrada sin vida ocho días después.
De acuerdo con fuentes cercanas a la Procuraduría General de Justicia (PGJ), la comandante Margarita "se vio presionada" por los familiares y amigos de Thalía, por lo que decidió presentar a su hijo ante la Primera Comandancia y al Ministerio Público de Homicidios, a fin de que Diego ampliara su declaración.
Entonces, desde hace tres días, el joven es interrogado por las autoridades, ya que las pistas descubiertas hasta el momento lo señalan como el probable responsable de este crimen.
Desde que Thalía desapareció, Diego Alonso se convirtió en el principal sospechoso por los familiares y amigos, ya que lo identificaban como una persona celosa y posesiva, lo cual le ocasionaba problemas a Thalía con sus padres.
Trascendió que durante los más de dos años que duró su noviazgo, los jóvenes terminaron en una ocasión debido a que Diego le pegaba a Thalía. En ese lapso, supuestamente, la joven inició una relación con Fabián Sánchez, su "amigo" de Huamantla, Tlaxcala. Sin embargo, terminó con él y volvió con Diego.
Ahora se ha revelado que posiblemente Diego pudo haber ingresado a la cuenta de Facebook de Thalía y sintió celos por la amistad que ella mantenía con Fabián.
Según el periódico Intolerancia, Diego recogió a Thalía el 14 de julio para llevarla a su escuela donde presentaría su examen, y le reclamó esa "amistad".
Aún no se sabe lo que pasó después, pero se presume que empezaron a discutir y al joven "se le pasó la mano", pues la chica ya no volvió a ser vista con vida.
La familia comenzó a preocuparse porque Thalía no regresaba a su casa e iniciaron la búsqueda con apoyo de sus amigos y las autoridades ministeriales.
Pasaron no más de tres días cuando los amigos y compañeros de universidad de la joven emprendieron una campaña de búsqueda a través de las redes sociales. Sin embargo, al mismo tiempo, se creó una cuenta falsa de Thalía en Facebook que fue eliminada días después.
Asimismo, según Intolerancia, la cuenta de Thalía estaba siendo manipulada mientras se realizaban las investigaciones, lo que dificultó el trabajo a las autoridades ya que entonces habían dos principales sospechosos: Fabián y Diego.
No obstante, tras el análisis de la forma en que el cuerpo de Thalía fue metido en bolsas de basura, las amenazas que recibía la familia de la joven, así como los medios en que el presunto secuestrador enviaba los mensajes y el lenguaje utilizado, los agentes ministeriales han establecido que el homicida es un policía o alguien que conoce sobre la seguridad pública.
Por ello, la Policía Ministerial sospecha que Diego es el probable responsable del asesinato de Thalía. Sin embargo, se espera que el crimen sea esclarecido de manera pronta, ya que el joven aún es interrogado por las autoridades de la PGJ.
