08/Agosto/2004
Beatriz del Castillo

 Maximino Bear Sanz negó que la Coordinación de Macroproyectos desaparezca, como se especuló tras los despidos en la Dirección de Ecología, pues sostuvo que la dependencia a su cargo aún tiene pendientes que sacar adelante con el 50% menos del presupuesto, aunque de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de este año cuenta con 12 millones de pesos, 5 millones más que en el 2003.

El funcionario respondió a quienes solicitan que al igual que en la Dirección de Ecología se realice una depuración en Macroproyectos, que aún está pendiente colocar los paraderos de taxis y que se concluyan las obras en la 3 oriente, además de otros proyectos que se negó a precisar.

Aseguró que la dependencia a su cargo también ha sufrido recortes y limitaciones con el programa de austeridad, e incluso dijo que su presupuesto se había reducido en 50%.

Sin embargo, en comparación con el 2003, en el que gastó poco más de 7 millones de pesos, en éste aumentó considerablemente la partida destinada a la dependencia, pues se le asignaron 12 millones de pesos.

El monto se definió al tomar en cuenta que para este año se había proyectado ejecutar el estacionamiento subterráneo de la 3 oriente-poniente, sin embargo el 5 de enero se anunció la cancelación del proyecto después de confrontaciones con el Instituto Nacional de Antropología e Historia y con la sociedad civil.

 

Aunado a lo anterior, presuntamente se encontraron siete niveles de catacumbas en la Catedral y, a fin de no alterar los vestigios, el ayuntamiento desistió de su intento de construir el aparcamiento.

Entonces Macroproyectos tomó a su cargo el plan del metro Angelopolitano, las modificaciones del Rastro Municipal y el programa de Mejoramiento del Centro Histórico, tareas que también fueron eliminándose.

El proyecto del metro Angelopolitano también quedó en el tintero luego que el 29 de enero la Secretaría de Comunicaciones y Transportes así como Banobras negaron que el presidente Vicente Fox aprobó una línea de crédito con ese fin, como lo sostuvieron el alcalde Luis Paredes Moctezuma y el propio Maximino Bear.

 

En el Rastro Municipal a Maximino Bear se le asignó la tarea de sacar adelante el proyecto de la planta de tratamiento, por lo que a partir de febrero comenzó a cabildear con los regidores la posibilidad de concesionar el servicio, al argumentar que la comuna ha invertido demasiado en éste y no estaba en posibilidades de ejercer una nueva inversión.

Sin embargo sus esfuerzos fueron en vano pues el servicio no se concesionó y su dependencia no tendrá mayor participación en el proyecto, pues el Cabildo determinó que el recurso para la construcción de la planta será administrado por el Comité de Obra Pública, que se encargará de todos los trámites y de entregar la planta al rastro.