Tehuacán, Pue.- Alejandro Rodríguez Sánchez carga ocho años de experiencia en las maquilas de Tehuacán. Por sus manos han pasado miles de pantalones de las más finas marcas. Su eficiencia fue tan alta, que en reiteradas ocasiones ganaba bonos de productividad. Pero desde hace tres años Alejandro fue expulsado del gremio industrial serrano. La razón: su antecedente como trabajador de Tarrant, ex consorcio del magnate Kamel Nacif Borge.
Como él, cientos de obreros forman parte de la llamada “lista negra” de trabajadores que ya no encuentran un espacio en las maquilas, simplemente por formar parte del movimiento que intentó obtener condiciones justas en Tarrant Apparel Group. Paradójicamente, “El Rey de la Mezclilla” aún obtiene beneficios económicos a través del grupo AZT Internacional y la construcción de un nuevo centro comercial.
A la par, la crisis de las maquiladoras cada día se acrecienta. Ángel Carrasco Rivera, regidor de Industria, Comercio y Turismo de Tehuacán, estima que en tan sólo los últimos 18 meses se han perdido cerca de 30 mil empleos en la zona. Hasta hace año y medio estaban asentadas en el valle alrededor de 350 empresas, cifra que se redujo a un centenar, calcula el funcionario municipal.
Sin embargo, para Nacif Borge todavía hay negocio para rato. Fuentes revelaron que el íntimo del pederasta Jean Succar Kuri, según el libro <i>Los Demonios del Edén</i>, inyectó cuantiosos recursos a la edificación del centro comercial El Paseo, propiedad de Antonio Haddad Yunes, ex gerente de Tarrant Apparel Group.
El Paseo está cimentado justo encima del manantial Balseca, cuyas aguas en otro tiempo fueron contaminadas por el mismo consorcio en el lavado de mezclilla.
AZT, nueva amenaza
En febrero de 2004, Tarrant Apparel Group cerró las ocho plantas que operaban en Tehuacán, en su negativa de respetar las condiciones laborales de sus empleados. Como resultado de esta acción, en Tehuacán se perdieron cerca de 6 mil empleos, según documentó la Comisión de Derechos Humanos y Laborales del Valle de Tehuacán.
Un panorama similar enfrentan los trabajadores del grupo textil AZT Internacional, donde Nacif Borge también tiene participación económica, por medio de su socio Huberto Guez (<i>Tehuacán: del calzón de manta a los blue jeans</i>, pág. 34).
Apenas hace un año, AZT Internacional empleaba a mil 600 trabajadores. Sin embargo, la cifra se redujo dramáticamente a menos de la mitad. Y no es todo, las condiciones laborales también se recrudecieron. Ahora el promedio de ingresos de los obreros es de 400 pesos semanales, cuando hace poco menos un año era casi del doble.
Obreros de la empresa revelaron que planean un paro de labores, como ocurrió con Tarrant Apparel Group. Sin embargo, los trabajadores saben que una huelga puede costarles su retiro definitivo de la maquila y su anexión a la “lista negra”.
Las condiciones laborales de AZT se están acercando mucho a la explotación que caracterizaba a Tarrant Apparel Group. En la empresa de Huberto Guez, los trabajadores sólo reciben paga por pieza terminada, no importando los atrasos propios de la producción.
Alejandro Gregorio Rafael, ex empleado de Tarrant Apparel Group, recuerda que éste consorcio fue el que impulsó la política de sobreexplotación en la zona. Antes de la llegada del grupo de Nacif Borge, en 2001, las condiciones de trabajo eran mucho menos críticas, evalúa el maquilador, quien, desde que participó en el movimiento obrero, no ha podido encontrar trabajo en su oficio.
En la actualidad, Gregorio Rafael se dedica a vender canastas, de forma ambulante, condición muy lejana a lo que le prometieron los gerentes de Nacif Borge cuando lo contrataron: “trabajarás para sobresalir en sociedad”.
Desbandada de obreros
Rodrigo Santiago Hernández y Martín Barrios Hernández, miembros de la Comisión de Derechos Humanos y Laborales del Valle de Tehuacán, advierten que paulatinamente la región se ha convertido en una zona expulsora de migrantes, algo que jamás había ocurrido.
El propio Ángel Carrasco Rivera, regidor de Industria, Comercio y Turismo de Tehuacán, reconoce que la maquila apenas genera 15 mil empleos, cifra muy alejada de la época de gloria en este sector, cuando más de 50 mil obreros se dedicaban a confeccionar prendas.
Ante la crisis, los obreros han optado por organizarse para exigir los cientos de millones de pesos que empresas como Calidad en Confecciones, de Lucio Gil Zárate –quien mandó encarcelar a Barrios Hernández a finales de 2005—les deben. Sin embargo, tal iniciativa profundiza el rechazo de las pocas empresas asentadas en la zona, pues los desempleados que participan en este tipo de movimientos de inmediato se suman a la “lista negra”.
La Comisión de Derechos Humanos y Laborales del Valle de Tehuacán fue testigo de cómo los trabajadores que participaron en la visita del subcomandante Marcos a Ajalpan, el mes pasado, fueron excluidos de sus propias empresas, y en algunos casos hasta despedidos.
“Desgraciadamente los obreros nos dimos cuenta muy tarde de todo este engaño”, lamenta Alejandro Gregorio Rafael, quien parece estar resignado a estar fuera de un taller de maquila.
