El gobernador Mario Marín Torres subrayó en un evento del DIF estatal que trabajará al frente del Poder Ejecutivo hasta concluir su periodo, a pesar de que el domingo pasado 30 mil poblanos salieron a las calles para solicitar su renuncia.
Sólo a través de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y el Congreso del Estado se podrá destituir a Marín Torres; no con movilizaciones sociales, enfatizó el secretario de Gobernación, Javier López Zavala.
A pesar de que el vocero estatal, Valentín Meneses Rojas, aceptó que la manifestación fue una importante muestra de un descontento social que no pueden “soslayar”, lo harán, porque carece de un fundamento jurídico que obligue la dimisión de Marín, “no tenemos porque espantarnos”.
López Zavala dijo que el gobierno no está dispuesto a determinar la permanencia de Marín a través de un referéndum, aunque insistió que su cargo tiene el respaldo de las 900 mil personas que votaron por él y que sólo “algunos poblanos” —de los cuales por lo menos 30 mil se manifestaron el domingo— desean su renuncia.
Sostuvo que la marcha en contra del gobernador y la procuradora General de Justicia, Blanca Laura Villeda Martínez, tuvo una participación menor a la que se efectuó el 17 de febrero pasado donde cerca de 15 mil personas —en su mayoría empleados gubernamentales— marcharon para apoyar a Marín.
Ante la negación del ejecutivo estatal a dar declaraciones, el titular de la Segob dijo que si la ciudadanía desea su destitución, se reflejará en el Congreso del estado a través de sus representantes, los diputados.
López Zavala señaló que el descontento social no representa una carga moral para el gobernador, sino una expresión de grupos políticos que pretenden “desacreditar y calumniar al ejecutivo”.
En rueda de prensa, Meneses Rojas subrayó que las acusaciones de ocupación de dos poderes y el tráfico de influencias no son suficientemente “graves” para que el ejecutivo estatal “pida licencia o renuncie”.
Aunque no hizo alusión directa a la supuesta conversación entre Mario Marín y el empresario Kamel Nacif Borge, indicó que el espionaje telefónico es capaz de destruir la imagen de un gobierno.
Señaló que contrario a la falta pruebas por parte de los partidos políticos acusadores —además de las grabaciones que se difundieron en los medios de comunicación—, el gobernador integra las evidencias que lo deslindarán de su presunta participación en el encarcelamiento de la periodista Lydia Cacho Ribeiro.
Ambos funcionarios públicos coincidieron en que la marcha mostró que existe gobernabilidad en el estado debido a que se desarrolló en términos de civilidad, respeto y tranquilidad.
Valentín Meneses indicó que ante el descontento social, lo único que puede hacer es un llamado a todos los sectores sociales para mantener la unidad.
***
Javier Puga Martínez
Propone Fernando Morales referéndum para evaluar a Marín
Fernando Morales Martínez propuso que en Puebla se realice un referéndum para saber si los ciudadanos están a favor o en contra del gobernador.
Según el diputado local, las miles de personas que salieron a manifestarse el domingo daña la imagen de Mario Marín, pues consideró que por muy fuerte que sea una marcha no puede afectarle a un gobernante, “aunque sean 15 ó 30 mil personas las que fueron”.
“Sin duda fueron ciudadanos, aunque también habría que ver cuantos poblanos oriundos creemos en las instituciones y en el gobierno del estado”, defendió el diputado por Ciudad Serdán.
Aseguró que los 30 mil manifestantes que se dieron cita el domingo pasado en el zócalo de la capital para repudiar a Mario Marín, sólo representan el cinco por ciento de las 550 mil personas que votaron en contra del PRI el 14 de noviembre del 2004.
Para el hijo del ex gobernador Melquiades Morales, los priístas que asistieron a la Marcha del Repudio —como Benita Villa Huerta, Guillermo Aréchiga, entre otros dirigentes del SNTE— son traidores del PRI y están dolidos.
“Benita Villa Huerta estaba muy bien en el sexenio anterior, era subsecretaria y no decía nada. Ahora que no tiene una oportunidad entonces si acusa maltrato y reclama y se va del partido. A lo largo de los últimos meses el comportamiento de estos priístas es reprobable.”
Respetable pero mejor esperar
Por otra parte, Pericles Olivares, señaló que la propuesta de Fernando Morales es respetable pero habría que mejor esperar a que la Suprema Corte de Justicia de la Nación emita un resolutivo.
Además el referéndum no se encuentra jurídicamente reglamentado en el estado de Puebla, indicó. Pericles Olivares rechazó hacer comentarios sobre la Marcha del Repudio pues en su caso como presidente de la comisión de Gobernación —encargada de investigar el caso Cacho-Marín— es mejor mantener la objetividad.
En el mismo sentido se manifestó el secretario de Gobernación, Javier López Zavala, señaló que el gobierno del estado no esta dispuesto a determinar la permanencia de Mario Marín a través de un referéndum. Zavala insistió que el gobernador tiene el respaldo de las 900 mil personas que votaron por él y que sólo “algunos poblanos” —de los cuales por lo menos 30 mil se manifestaron el domingo— desean su renuncia.
En contraparte, Víctor León Castañeda, líder de la bancada panista, desestimó la propuesta. “Para qué un referéndum. Yo le puedo simplificar las cosas. Que renuncie, que no pierda el tiempo. Ayer quedó claro el sentir de los poblanos. Si se niega lo que ayer manifestaron y vimos entonces es responsabilidad del PRI seguir manteniendo a Mario Marín”.
